Dos modelos muy diferentes de competitividad

10 Jun Dos modelos muy diferentes de competitividad

Ayer pude recordar al ministro de economía, el señor de Guindos, su nuevo compromiso incumplido con la Agencia Estatal de Investigación, durante la sesión de control al gobierno.

Por mucho que corran ahora no van a lavar la cara en el último momento como los malos estudiantes. Lo único que han hecho, a pesar de que les ofrecimos un acuerdo desde el primer día por tratarse de un tema de país, es vaciar laboratorios, quedar impasibles ante el cierre de empresas innovadoras y expulsar a los científicos, que según ellos sobraban en España.

Llevan cuatro años lastrando la competitividad -la buena- de nuestro país, al haber paralizado el sistema científico y abandonado a las empresas que innovaban, y su marca es la mentira como simboliza la Agencia Estatal de Investigación, que ya en junio de 2012 tenían que haber puesto en marcha.

Por el contrario los socialistas tenemos muy claro cómo hay que aumentar la productividad y prueba de ello es la Ley de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación que aprobó el último gobierno socialista con el apoyo de toda la Cámara, y que los populares han sido incapaces ni siquiera de cumplir y poner en marcha. Para nosotros, la política de ciencia e innovación es clave para la competitividad de la economía y también para el bienestar social, dos conceptos que no pueden ir separados.

A estas alturas ya sabemos cuál es su modelo -el de la derecha- en materia de competitividad y productividad: el despido libre, bajar salarios y la pobreza laboral. El nuestro es el del crecimiento, pero por medio del conocimiento, el talento y la inversión en las empresas de la economía digital. Todo eso es productividad y es algo de lo que ellos saben muy poco.